Modificado el 14 junio, 2025
Publicidad. Última actualización el 2025-06-24. Algún precio puede haber cambiado desde la última actualización.
En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, los smartphones de segunda mano se han convertido en una opción cada vez más atractiva. No solo son una alternativa económica para acceder a modelos de alta gama, sino que también contribuyen a la sostenibilidad al extender la vida útil de los dispositivos.
Sin embargo, detrás de la promesa de un buen trato, se esconden una serie de riesgos que, si no se tienen en cuenta, pueden convertir una ganga en un dolor de cabeza. Este artículo te guiará a través de los errores más comunes al adquirir un smartphone usado y te proporcionará las claves para evitarlos, asegurando que tu compra sea inteligente y sin arrepentimientos.
1. No Investigar al Vendedor y la Procedencia del Teléfono
Uno de los errores más críticos es confiar ciegamente en el vendedor o no verificar la legalidad del dispositivo. Comprar a alguien sin reputación o sin conocer el origen del teléfono puede llevarte a adquirir un dispositivo robado o un fraude.
Cómo evitarlo:
- Elige plataformas fiables: Opta por marketplaces conocidos como Wallapop, eBay o Milanuncios, que suelen tener sistemas de reputación y valoraciones de vendedores. Revisa siempre los comentarios y la puntuación de quien vende. También puedes encontrar móviles más baratos en Amazon Renewed, donde venden productos reacondicionados y de segunda mano con garatía.
- Verifica la identidad: Si es posible, realiza la transacción en persona en un lugar público y seguro. No dudes en pedir alguna identificación si la situación lo amerita, especialmente para compras de mayor valor.
- La importancia del IMEI: Este es el Identificador Internacional de Equipo Móvil, un número único para cada dispositivo. Es crucial que lo pidas antes de la compra y lo verifiques. Puedes comprobar si el teléfono ha sido reportado como robado o en lista negra a través de bases de datos online (algunas operadoras ofrecen este servicio o páginas web especializadas). Apunta también este número en un recibo si decides formalizar la compra.
2. No Inspeccionar el Dispositivo a Fondo

La primera impresión puede engañar. Muchos compradores se centran solo en el aspecto exterior, pasando por alto fallos funcionales que pueden ser costosos de reparar o incluso dejar el teléfono inservible.
Cómo evitarlo:
- Inspección visual detallada:
- Daños físicos: Busca rayaduras profundas, golpes o abolladuras en el chasis, la pantalla y los módulos de cámara. Estos pueden indicar caídas severas.
- Señales de manipulación: Observa si los tornillos parecen estar manipulados o si hay holguras inusuales en las uniones. Esto podría significar que el teléfono ha sido abierto o reparado con piezas no originales.
- Daños por agua: Muchos teléfonos tienen indicadores de humedad ocultos (pequeños puntos que cambian de color). Investiga dónde se encuentran en el modelo que te interesa y compruébalos.
- Pruebas de hardware esenciales (¡no te saltes ninguna!):
- Pantalla: Revisa píxeles muertos (puntos negros o de colores fijos), quemaduras (imágenes fantasma persistentes, comunes en OLED), y la sensibilidad táctil en toda la superficie. Prueba también la función multitouch.
- Cámaras: Abre la aplicación de cámara, prueba la frontal y trasera, el flash y el enfoque automático.
- Botones: Presiona todos los botones (encendido, volumen, inicio si lo tiene) para asegurarte de que responden correctamente.
- Puertos: Conecta un cargador para verificar el puerto de carga (USB-C o Lightning) y unos auriculares si tiene puerto jack de auriculares.
- Micrófonos y altavoces: Realiza una llamada de prueba para comprobar el micrófono y el altavoz de llamada. Reproduce música o un video para testear el altavoz principal.
- Batería: Si es un iPhone, ve a «Salud de la Batería» en los ajustes. En Android, puedes usar apps de terceros para verificar el estado de la batería. Observa también si la batería se descarga rápidamente durante la prueba.
- Conectividad: Prueba el Wi-Fi, Bluetooth y los datos móviles (inserta tu propia tarjeta SIM para una prueba real).
- Sensores: Si aplica, comprueba el sensor de huella dactilar y el reconocimiento facial.
3. No Verificar la Autenticidad y el Bloqueo del Teléfono
Un smartphone de segunda mano puede ser una imitación barata o estar bloqueado, impidiendo su uso.
Cómo evitarlo:
- Bloqueo de cuenta: Este es un punto crítico. Para iPhones, asegúrate de que el vendedor haya desvinculado su cuenta de iCloud. En Android, el teléfono no debe tener una cuenta de Google asociada. Pide al vendedor que lo haga frente a ti y reinicia el teléfono para asegurarte de que inicia como si fuera un dispositivo nuevo.
- Bloqueo de operador: Confirma que el teléfono esté libre para usar con cualquier compañía telefónica. Si no lo está, solo podrás usarlo con el operador original.
- Autenticidad: Desconfía de precios «demasiado buenos para ser verdad». Compara el modelo físico con imágenes oficiales online, y verifica los números de serie y IMEI para asegurarte de que corresponden con el modelo que te están vendiendo.
4. Ignorar la Letra Pequeña y la Garantía
Asumir que un smartphone de segunda mano tiene garantía o política de devolución puede ser un error costoso.
Cómo evitarlo:
- Garantía: Si compras en una tienda especializada en segunda mano o a través de plataformas que lo ofrecen, pregunta explícitamente por la duración y condiciones de la garantía. En la mayoría de las compras entre particulares, el teléfono se vende «tal cual».
- Política de devolución: Aclara si hay alguna posibilidad de devolver el teléfono en caso de que surja un problema importante poco después de la compra. Aunque esto es raro en ventas entre particulares, algunas plataformas ofrecen cierta protección.
- Vicios ocultos: Conoce tus derechos. Si descubres un «vicio oculto» (un defecto grave que el vendedor conocía y ocultó, y que hace el dispositivo impropio para su uso), la ley te protege, pero probarlo puede ser complicado.
5. No Negociar el Precio o Pagar en Efectivo sin Recibo
La prisa o la falta de previsión en el pago pueden dejarte desprotegido.
Cómo evitarlo:
- Investiga el precio de mercado: Antes de contactar al vendedor, averigua el valor promedio del modelo que te interesa en el mercado de segunda mano, considerando su estado y antigüedad. Esto te dará una base sólida para negociar.
- Negocia con confianza: No tengas miedo de ofrecer un precio más bajo, siempre de forma razonable y justificada (por ejemplo, si encuentras algún pequeño defecto).
- Métodos de pago seguros: Prefiere métodos que dejen un rastro, como transferencias bancarias o pagos a través de plataformas que ofrecen protección al comprador. Si pagas en efectivo, solicita un recibo simple que incluya los datos del vendedor, el modelo y el IMEI del teléfono, la fecha y el monto de la transacción.
En resumen, la compra de un smartphone de segunda mano puede ser una excelente inversión, tanto para tu bolsillo como para el medio ambiente. Sin embargo, el éxito de la transacción depende en gran medida de tu diligencia y precaución. Sigue estos consejos, tómate tu tiempo para investigar y probar el dispositivo, y estarás un paso más cerca de conseguir un excelente teléfono sin sorpresas desagradables. ¡Tu nuevo smartphone de segunda mano te espera!
